A finales del pasado año 2021 vimos como por primera vez que se recuerde en el barrio, gracias al trabajo conjunto de los vecinos afectados principalmente, la policía y el Ayuntamiento tomaron medidas para cortar de raíz el botellón que se concentraba cada partido del Betis en calle Tajo y alrededores. En la AAVV Foro Heliópolis no podíamos estar más contentos al ver que, por fin, nuestras quejas habían sido escuchadas y la Policía Nacional aplicaba la ley ante la barbarie que tomaba nuestro barrio quincenalmente. Ha quedado demostrado que, a la hora de combatir el botellón ilegal, si se quiere, se puede.
Tristemente, la solución aplicada ha sido del todo insuficiente. La forma en la que el parque del Guadaira ha amanecido tras el derbi suspendido ayer sábado es absolutamente desoladora. Además, vecinos han denunciado que el botellón se produce ahora en la zona de la plaza Chano Lobato (y las casas de las Siete Calles) y en la calle Monzón. El problema simplemente se ha trasladado a otro lugar y las consecuencias no pueden ser más desastrosas como muestran las imágenes y vídeos que han compartido los vecinos.

El estado en el que ha quedado el parque del Guadaira este fin de semana es intolerable. La basura ha inundado todos los rincones del parque hasta el mediodía de hoy, cuando finalmente han aparecido las cuadrillas de limpieza de Lipasam. Dispositivo de limpieza que, por cierto, no ha sido suficiente como han denunciado un buen puñado de vecinos, aportando pruebas gráficas de la infinidad de cristales y plásticos que seguían tirados por todas partes tras la batida. Una zona de interés medioambiental convertida en un vertedero primero y en un campo de minas después, completamente inutilizado para el disfrute ciudadano. Desde nuestra asociación no podemos menos que mostrar nuestra impotencia e indignación ante este verdadero atentado contra nuestro barrio.
Desde la AAVV Foro Heliópolis estamos insatisfechos con la solución parcial que se ha aplicado para la problemática de las botellonas de los partidos Betis. Como decíamos: si se quiere, se puede. Pero para lograr una solución realmente satisfactoria es necesario involucrar a todas las partes implicadas, incluído al Real Betis Balompié. Se debe hacer saber a los hinchas del club que hay algunos comportamientos que son intolerables, tomando algún tipo de medida que corte de raíz las acciones incívicas e ilegales que se repiten partido tras partido. Al mismo tiempo, el club y las autoridades deben reubicar a estas personas que invaden nuestras calles y nuestros parques en alguna zona donde la suciedad, los destrozos y los conflictos estén localizados y controlados. No se puede permitir que el barrio quede en este estado cada vez que el Betis juega en el Benito Villamarín. Seguiremos buscando una salida con todas las partes.