Por si el barrio y alrededores no tuviera suficiente con el denominado nono, o ñoño, o poño (escribe con caracteres trucados), ahora surge otro ambiciosillo de fama que ha comenzado a lo grande: destrozando con sus pinceles las fachadas de la parada de autobús de Heliopolis, la que da a la avenida Padre García Tejero. Firma con el acrónimo de FGS: Fatuo, Grosero y Sociópata.